Als eerbetoon aan een overleden vriend organiseert een Libanese vluchteling een reünie met vrienden van weleer, van wie de meesten sinds de burgeroorlog van de jaren zeventig hun vaderland hebben verlaten.
Los nietos de Ahmad Abd el-Gawwad, el anciano comerciante de El Cairo, se distancian de la tutela familiar y se comprometen con diferentes opciones políticas en el convulso Egipto de los años treinta y cuarenta, desde el comunismo al fundamentalismo islámico. Frente al desencanto de la generación anterior, estos jóvenes encarnan la vitalidad de una nación que afronta con valentía su contradictorio futuro.
Un padre longevo se aísla en su Casa Grande tras dejar unas tierras a esos descendientes que expulsó un día de su espléndido jardín. Uno de sus hijos, Idrís, tienta a su hermano Adham. A partir de ahí, la simiente de ambos se multiplica dando lugar a un barrio de El Cairo dividido en dos grupos: los que se ganan el sustento y los que ejercen de caciques.
Devastación debería venir con una advertencia de las autoridades sanitarias. La novela de Tom Kristensen, sobre un crítico literario de treinta y tantos años que se arroja a una vorágine de alcohol, sexo y jazz, es uno de los relatos de autodestrucción más inquietantes y absorbentes de la literatura europea moderna. A medio camino entre el Céline del Viaje al fin de la noche y Knausgård, devoto confeso de Devastación, en estas páginas conoceremos a uno de esos personajes inolvidables de la gran literatura universal.
Aburrido del progresivo aburguesamiento de su existencia, y asfixiado por las actitudes «correctas», las conversaciones anodinas y las reuniones literarias, Ole Jastrau siente que su vida carece de sentido: a pesar de sus coqueteos con algunas ideas políticas y la religión, su sensación de vacío vital crece cada día, así como el sentimiento de haber traicionado el espíritu revolucionario y poético que lo animaba en su juventud. Es esa frustración la que lo llevará a emprender su particular descenso a los infiernos.
Considerada El lobo estepario de las letras danesas, Devastación (1968) es también un maravilloso, y a menudo humorístico, retrato del Copenhague de los años veinte. Inédita en castellano hasta la fecha, esta obra maestra de la literatura nórdica está siendo recuperada ahora, cincuenta años después de su primera edición, en todo el mundo.